Para los amantes del esquí Pas de la Casa es sinónimo de uno de los mejores puntos donde se puede practicar el deporte blanco por excelencia. Concretamente, Pas de la Casa es un pueblo de la parroquia andorrana de Encamp y está en la frontera entre Andorra y Francia. ¿A qué debe su nombre? A principios del siglo XX solo había una cabaña de pastores y era el único paso al País de los Pirineos.
Existen muchísimos hoteles en Pas de la Casa, de diferentes categorías para adecuarse a distintos tipos de presupuesto. Su belleza es inmensa, pues se mezcla la modernidad con la naturaleza salvaje de la zona. Es un punto de salida perfecto para descubrir todos los atractivos que ofrece Andorra. Jóvenes y mayores se sienten muy a gusto en este lugar: hay todo tipo de restaurantes y locales de ocio para alargar la jornada hasta la madrugada.
Hablando concretamente del esquí, cabe mencionar que Pas de la Casa es uno de los accesos naturales a la macro estación Grandvalira, que empezó a funcionar en 2003, aglutinando las anteriores Pas de la Casa-Grau Roig y Soldeu-el Tarter. Por supuesto, Grandvalira no es solo una estación de esquí, durante todo el año se pueden realizar actividades tales como Karting, rutas en bicicleta o jugar al golf.
Grandvalira tiene decenas de kilómetros de pistas esquiables. Cuenta con remontes, telecabinas y otros accesos a los puntos más altos de la montaña. Hay pistas para todos los gustos y estilos. Para los más profesionales, tiene varias pistas freestyle, que siempre son un valor añadido para aquellos que controlan bastante. Por supuesto, nadie nace sabiendo. Por eso en Grandvalira dan mucha importancia a la Escuela de Esquí y a los cursos de aprendizaje. Cuanta más formación tengan los usuarios de las pistas de esquí menos accidentes se producen y más pueden disfrutar todos.
La estación está llena de restaurantes de comida rápida para tomar un tentempié y de restaurantes para los que quieren dedicar más tiempo (y dinero) a comer. Se encuentran repartidos por toda la estación y están a diferentes alturas. También hay varios alojamientos entre remonte y remonte.
Incluso en Grandvalira es posible encontrar un Iglú Hotel. El lugar está construido totalmente en hielo y nieve, y se encuentra a 2.350 metros de altura. Contiene cinco habitaciones iglú y cada una de ellas tiene servicio WC y jacuzzi privado. También dispone de áreas sociales, bar-restaurante, terraza y bañeras de hidromasaje. El lugar, no cabe duda que es frío, pero es sumamente original y acogedor. ¿Te atreves a alojarte en este sorprendente hotel?
Las actividades en Grandvalira son inagotables. Se puede dar un paseo en helicóptero por la montaña, lo cual resulta espectacular. También se pueden realizar otros deportes relacionados con la nieve. Y como se comentaba anteriormente, el día no termina con la puesta de sol. En Pas de la Casa se puede continuar la fiesta todos los días de la semana hasta altas horas de la madrugada. Solo para los más resistentes.
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